El Parque Nacional Cerro Castillo se ubicada en la Región de Aysén. Fue creada en el año 1970, como Reserva, y tiene una superficie de 138.164 hectáreas.
Por Carretera Austral, viajando hacia el sur, a 64 Kilómetros de la Ciudad de Coyhaique, capital de la región de Aysén, comienza a aparecer el inconfundible perfil del Cerro Castillo. Famoso por su belleza e inspiración para un número creciente de escaladores, dispuesto a desafiar, no sólo la cara sur del torreón norte o la ruta por el canalón central de la Cara Este, sino también, ascender cerros aledaños como La Iglesia, La Vieja, El Facón, El Palo u otros innominados…y disfrutar de una memorable aventura.
La vegetación predominante corresponde a la del Bosque Caducifolio de Aysén, en el cual, además de Lenga -especie dominante- es frecuente la presencia de Ñirre, Coigüe de Magallanes, Tepa, Mañío, Tineo, Canelo, Ciprés de las Guaitecas, Notro y una serie de especies arbustivas como el calafate, chaura y pastizales.
La fauna está representada por mamíferos como el Huemul, Guanaco y en los sectores más orientales, Zorro gris y colorado, Piche, Chingue patagónico, Puma, Gato de Geoffroy y ratón colilarga. Entre las aves son comunes Cóndor, Águila, Cernícalo, Cachaña, Zorzal y otras aves menores.
En el acceso principal hay un área de camping, que cuenta con seis sitios equipados con baños, agua potable y ducha con agua caliente. Se puede recorrer a caballo. Sin embargo, la mejor opción es el trekking. El circuito promete ser en un serio competidor para Torres del Paine, gracias a sus espectaculares vistas, glaciares colgantes, senderos que se internan por bellos bosques de lengas, lagunas, ríos, montañas… y porque además, se da una condición que es muy valorada por los amantes de los recorridos al aire libre. No presenta la congestión de otros parques, lo que favorece un contacto más íntimo con su exuberante naturaleza.
Varios senderos originalmente trazados y utilizados por colonos para el traslado de animales, se utilizan como senderos peatonales, pero están escasamente señalizados o definitivamente no existen -sobre todo en la parte alta de los valles- por lo que el uso de guías es necesario, no solo para no extraviarse, sino también, porque aventurarse en estas condiciones puede constituir un riesgo innecesario.
El sendero de Laguna Chiguay, ofrece en un corto trayecto (2 horas), apreciar la belleza de la reserva, sus pequeñas lagunas glaciares y ventisqueros colgantes. Quienes quieran caminar más, pueden optar por el sendero del Estero Parada. Un camino de 16 Km. que nos lleva la campamento Neozelandés. Quienes gocen de buen estado físico, el equipo necesario y estén dispuesto a caminar 3 o 4 días, pueden recorrer el sendero Valle de la Lima, que comienza en Villa Cerro Castillo y recorre 45 km. de la reserva.